Richard Linklater habla sobre el cine independiente
Literaria o leve, ecléctica y clásica, indie y comercial: la obra de Richard Linklater contribuyó a darle forma al cine independiente de Estados Unidos. Desde la deformidad fragmentada de Slacker (1991) al estudio longitudinal de Boyhood (2014), sus películas exploran un amplio espectro de temas universales reflejados a través del prisma de lo contemporáneo y atravesados por cuestiones filosóficas sobre el paso del tiempo.
El director está presentando en el Festival de Venecia su última película, Hit Man, y habló con The Hollywood Reporter sobre el estado de la industria cinematográfica y, alerta spoiler, es pesimista al respecto:
“Se siente como si se lo hubiera llevado el viento, o se lo hubiera llevado el algoritmo. A veces hablo con algunos de mis contemporáneos sobre lo que ocurrió durante la década de 1990 y decimos: “Dios mío, hoy nunca podríamos lograr eso” […] Pude participar en lo que siempre se siente como la última buena era para el cine”.
Los años 90’s fueron una gran década para el cine, con su invasión de autores independientes. Basta pensar en todos los grandes cineastas que surgieron en esta década: Quentin Tarantino, Paul Thomas Anderson, Steven Soderbergh, David Fincher, Alexander Payne, Todd Solondz, Richard Linklater. Fue otro movimiento parecido al que surgió en Estados Unidos en los años 70’s.
¿Existe una nueva generación que realmente valora el cine? El temor de Richard Linklater de que no haya suficiente masa crítica en la cultura para sostener “lo que alguna vez fue” surge inmediatamente después del fenómeno ‘Barbenheimer‘ de este invierno. Muchos se preguntan si ese fue el último espejismo para un medio que algunos creen que está desapareciendo. Otros, como Francis Ford Coppola, lo ven como una señal esperanzadora de lo que está por venir.
“Con una cultura y una tecnología cambiantes, es difícil ver que el cine vuelva a recuperar la prominencia que alguna vez tuvo. Creo que pudimos sentirlo cuando empezaron a llamar “contenido” a las películas, pero eso es lo que sucede cuando dejas que la gente de tecnología se apodere de tu industria. Es difícil imaginar que el cine independiente en particular tenga la relevancia cultural que tuvo en otro momento”.
“Algunos ciudadanos realmente inteligentes, apasionados y buenos ya no tienen la misma necesidad de literatura y películas. No ocupa el mismo espacio en el cerebro. Creo que así es como hemos entregado nuestras vidas, en gran medida, a esto que agota la necesidad de curar y llenarnos de significado del arte y los mundos ficticios. Esa necesidad se ha satisfecho con (seamos realistas) sistemas avanzados de entrega de publicidad”.
El resultado es que cineastas menos talentosos o influyentes entran en escena. Entonces, ¿cómo es el futuro del cine estadounidense? Para Richard Linklater es “sombrío, pero todavía hay algunos cineastas que forman filmografías impresionantes, a pesar de que el sistema de estudios no está interesado en darles a muchos de ellos espacio para la libertad creativa”.
La obra Richard Linklater
Durante los últimos 25 años, el cine ha dado nombres interesantes –Christopher Nolan, Denis Villeneuve, Damien Chazelle, Sean Baker, Sofia Coppola, los hermanos Safdie-, pero el número palidece en comparación con el fructífero talento de décadas pasadas. Sin embargo, el cine mundial está en buena forma y algunos realizadores prometedores siguen apareciendo en cada festival de cine.
Richard Linklater ha logrado acumular un corpus atractivo de películas: Slacker, Dazed & Confused, la trilogía Antes del Amanecer, Antes del Atardecer y Antes del Anochecer, el clásico moderno Boyhood, Waking Life, La Escuela de Rock, Bernie, Apolo 10 1/2.
Hit Man -que aún no tiene una fecha de estreno oficial- coescrita y protagonizada por Glen Powell y basada en un artículo del Texas Monthly, sigue a un policía encubierto que se hace pasar por un sicario y se ve atrapado en un complot que involucra a una mujer necesitada. Mientras tanto, Linklater también está trabajando en Merrily We Roll Along, un musical basado en la obra de 1981 de Stephen Sondheim que se filmará a lo largo de 20 años. Actualmente se espera que se estrene alrededor de 2039.