La adaptación de Paul W.S. Anderson del cuento En las Tierras Perdidas
Dicen que George R.R. Martin no termina nunca. Que sus lectores esperan, desesperan, envejecen mientras él sigue prometiendo el próximo libro de Canción de Hielo y Fuego, Vientos de Invierno. Pero Martin tiene otros cuentos que contar. En 2025 llega una película basada en un relato que escribió hace cuarenta años, cuando todavía no era el tipo que reinventó los dragones. En Las Tierras Perdidas (In Lost Lands) son apenas seis mil palabras que Martin escribió para una antología de fantasía en 1982, titulada Amazons II. Seis mil palabras que ahora son dos horas de celuloide, efectos especiales, presupuesto millonario.
Paul W.S. Anderson – conocido por sus adaptaciones cinematográficas de videojuegos como Resident Evil y Monster Hunter – agarró el cuento y lo convirtió en su próximo intento de franquicia. Puso a su mujer, Milla Jovovich, de protagonista. Ella es Gray Alys, una hechicera que cumple deseos por un precio. Alys es contratada por una reina desesperada que la envía a un páramo fantasmal en busca de un poder mágico legendario. Para completar su misión, Alys se une a Boyce (Dave Bautista), un cazador que conoce los secretos de las tierras perdidas.
El tráiler de En las Tierras Perdidas se parece más a Rebel Moon que a Game of Thrones, pero qué importa: lo interesante es que Martin está metido en el proyecto, trabajando junto a Anderson y el guionista Constantin Werner. El escritor dijo en su blog que que siempre quiso escribir más historias de Gray Alys. Que tenía ideas para seis, ocho, diez cuentos más. Que empezó uno y lo dejó ahí, dos páginas huérfanas en algún cajón de Nuevo México. Ahora habla de novelas gráficas, de expandir el universo, de contar más aventuras si la película funciona. Tiene una hoja con ideas por ahí, dice. Como si no tuviéramos todos una hoja con ideas por ahí.
En las Tierras Perdidas: George R.R. Martin antes de Game of Thrones
En las Tierras Perdidas es de cuando Martin escribía más ciencia ficción que fantasía. Antes de los Stark y los Targaryen, antes de que HBO lo convirtiera en una industria de series derivadas. Este cuento fue su primer coqueteo serio con la fantasía oscura, esa que después lo haría famoso.
Y mientras HBO sigue exprimiendo Game of Thrones con precuelas y spin-offs, esta película parece algo distinto. Más pequeño, tal vez. Más cercano a lo que Martin era antes de ser MARTIN, el tipo que no termina nunca lo que empezó pero que no para de empezar cosas nuevas.
La reina desesperada del cuento manda a Alys a buscar poder mágico en un páramo fantasmal. Uno se pregunta si no es Martin mismo el que busca algo en estas viejas tierras perdidas de su imaginación. Algo que dejó ahí hace cuarenta años, cuando todavía no sabía que iba a inventar el invierno que nunca llega.
Mirá el tráiler a continuación: