Es bastante extraordinario ver cuánto ha cambiado el personaje de Loki (Tom Hiddleston) a lo largo de sus diversas apariciones en el Universo Cinematográfico de Marvel. Un personaje que no fue más que el antagonista de Thor y Los Vengadores se transformó en un Dios que tiene autoridad sobre toda la línea temporal. Aunque los proyectos más recientes del MCU están teniendo rendimientos mediocres, el Dios del Engaño siguió desarrollándose como un personaje interesante, con cada aparición agregando algo nuevo a su historia.
Aunque el final de la temporada 2 tiene ramificaciones importantes para el resto del MCU, fue más interesante como un nuevo paso dentro de su viaje que como un adelanto de lo que está por venir. La misión final del personaje titular para restaurar el equilibrio en las líneas temporales sirve como un ingenioso homenaje a un momento similar en Doctor Strange (Scott Derrickson, 2016)
Loki y Doctor Strange utilizan bucles temporales a su favor
Después de pasar la mayor parte de la segunda temporada trabajando junto a Mobius (Owen Wilson) para restaurar evitar la destrucción de la AVT, Loki finalmente aprende a usar sus nuevos poderes de deslizamiento en el tiempo a su favor.
Siglos de entrenamiento con O.B. (Key He Quan) le enseñaron a retroceder en el tiempo para usar el multiplicador de Victor Timely (Jonathan Majors) y expandir el Telar Temporal. Esto requiere más de unos pocos intentos de su parte; el Dios del Engaño tiene que seguir atravesando el bucle temporal para detener que todo el tiempo y el espacio caigan en el caos. Es un momento algo humorístico, ya que Loki se ve obligado a retroceder a través de los eventos de la primera temporada para asegurarse de tomar todas las decisiones correctas.
No es la primera vez que el MCU utiliza un bucle temporal como dispositivo narrativo en el tercer acto. En Doctor Strange, Stephen Strange (Benedict Cumberbatch) se ve obligado a proteger la Tierra de la entidad malévola Dormammu de la Dimensión Oscura, un villano multiversal indestructible. Stephen se da cuenta de que no puede derrotar a Dormammu de manera tradicional, así que lleva un elemento de su realidad a la dimensión oscura: el tiempo. Stephen se sacrifica innumerables veces antes de que Dormammu finalmente ceda y acepte un trato para expulsar a Kaecilius (Mads Mikkelsen) de su realidad. Al igual que Loki, Stephen utiliza su conocimiento del tiempo para encontrar una solución a un escenario “sin ganadores”.
Las escenas son efectivas porque hablan de sacrificio. El sacrificio es un tema clave dentro del MCU, ya que muchos de los héroes ofrecieron sus vidas para proteger a personas inocentes. Loki no es un héroe tradicional, y Stephen no se considera necesariamente un personaje empático. Sin embargo, tanto Loki como Stephen reconocen que hay cosas más importantes en juego que su satisfacción personal.
Loki debe asegurarse de que todas las líneas de tiempo no se vean comprometidas, y Stephen debe evitar que Dormammu tome el control de la realidad. El bucle temporal permite a ambos personajes tomar decisiones diferentes mientras representan diversos escenarios. Muestra a ambos personajes en su momento más creativo y decidido. Ambos se dan cuenta de que, para bien o para mal, el destino del mundo está en sus manos.
Las similitudes entre Loki y Stephen no se detienen ahí. Verlos a ambos usar el bucle temporal a su favor sirve como un medio de redención. Es fácil olvidar que esta es la misma variante de Loki que acababa de intentar tomar el control de la ciudad de Nueva York con su ejército de Chitauri en The Avengers (Joss Whedon, 2012); el hecho de que ahora esté dispuesto a pasar siglos trabajando para el beneficio de todas las criaturas vivientes es un gran desarrollo del personaje. La redención de Loki se estableció en el primer episodio de la serie cuando la Autoridad de Variación Temporal le mostró cuán poco había llegado a ser su vida.
Stephen puede no haber sido un villano como Loki, pero también es digno de redención. La actitud arrogante y audaz de Stephen lo convirtieron en un persona demasiado desagradable. A pesar de tener el poder sobre la vida y la muerte como cirujano, a Stephen no parece importarle demasiado sus pacientes. Servirles es poco más que un medio para satisfacer su ego.
Al igual que Loki, Stephen se da cuenta de que hay un valor en el poco tiempo que tiene a través de su entrenamiento con The Ancient (Tilda Swinton). Como ella le dice, “la muerte es lo que le da sentido a la vida”. La resonancia emocional tanto de Loki como de Doctor Strange los convierte en proyectos destacados en sus respectivas fases.
‘Loki’ brinda a la trama del personaje una conclusión satisfactoria
El uso del bucle temporal para reflexionar sobre las aventuras pasadas de Loki no fue solo una forma divertida de cerrar la temporada; permitió al programa explorar cuán lejos llegó Loki desde el comienzo de la serie.
Uno de los flashbacks del pasado de Loki incluye su primer encuentro con Mobius. En lugar de ser arrogante y agresivo como lo fue en el primer episodio de la serie, Loki le explica a Mobius por qué necesita su ayuda. Loki comenzó la serie como un personaje que se percibe a sí mismo como un gobernante, pero ahora está aprendiendo las responsabilidades que conlleva el liderazgo. Ahora está en una posición de poder mayor que nunca, ya que sostiene las ramas de la existencia en el centro de Yggdrasil, el árbol de la vida.
Tanto Loki como Stephen pueden ascender a una posición superior después de sus experiencias en el bucle temporal. Stephen finalmente demuestra ser un Hechicero Supremo digno, y Loki está listo para ser un cuidador mucho más juicioso de las múltiples líneas de tiempo del multiverso en comparación con Aquel Que Permanece. Aunque muchas de las películas del MCU fueron acusadas de presentar la misma secuencia de acción en el tercer acto, Loki y Doctor Strange encontraron formas creativas de mostrar cómo sus héroes evolucionaron. Todo es solo cuestión de tiempo.
Tanto Loki como Doctor Strange se encuentran disponibles en Disney Plus.
