Si la serie de Peter Morgan se había caracterizado por presentar una mirada que mezclaba fascinación y cinismo con respecto a la monarquía -seres demasiado humanos que habitaban la zona inestable ubicada entre sus pasiones personales y el parasitismo social-, la segunda parte de la temporada 6 de The Crown continúa el tono hagiográfico de los primeros cuatro episodios, para completar un relato que fue perdiendo su fuerza crítica hasta llegar a un final que se siente aséptico y obsecuente, en el que Morgan define el legado de la reina Isabel II con una palabra, sacrificio, una reducción simplista para una serie que buscaba constantemente la grandeza.
The Crown temporada 6, episodio 5: el duelo de Carlos y sus hijos
El primero de los nuevos episodios (5-10) se centra en la frágil y tensa relación entre el Príncipe Carlos (Dominic West) y su hijo William (Ed McVey) mientras procesan el duelo tras la muerte de Diana. Si a lo largo de sus temporadas The Crown mostró a un Carlos siempre conflictuado pero afectuoso y dedicado a sus hijos, en sus memorias tituladas Spare, Harry (Luther Ford) se refiere al sentimiento de abandono y desconsuelo que sintieron los hermanos por un padre frío y distante en el momento que más lo necesitaban.
Cuando Carlos habla con su hermana, acuerdan que es bueno que William tenga compañeros cercanos en Eton porque él “no tenía amigos” en la escuela. En la vida real, el príncipe siempre se sintió aislado en Gordonstoun, y su ex compañero de clase Johnny Stonborough escribió en Telegraph que era “imposible” trabar amistad con él sin convertirse en el objeto de acoso por ser “uno de los amigos del rey”.
Como parte del impulso de Carlos para vincularse con sus hijos, los lleva a un viaje oficial a la Columbia Británica y a esquiar en Whistler. El viaje es un desastre, con periodistas y grandes multitudes que los acosan en todo momento. Eso ocurrió en la vida real.
William define a Carlos como alguien celoso de su popularidad y escupe las palabras: “Te cuesta ser eclipsado”. Es imposible saber si la conversación alguna vez ocurrió, pero el punto más importante es cierto: el William ficticio tiene la entrevista de Diana con Martin Bashir en mente, en la que la princesa hace el mismo reclamo (en el presente, con Carlos ahora siendo rey, la popularidad de William sigue superando la suya).
En sus memorias, Harry dice que “William hacía todo lo que Carlos quería, y muchas veces no quería que hiciera demasiado, porque a él y a Camila no les gustaba que Willy y Kate recibieran publicidad”. Harry agregó que antes del compromiso público, el personal de Carlos insistió en que Kate no fuese fotografiada sosteniendo una raqueta de tenis. “Sin duda, ese tipo de foto habría sacado a papá y a Camila de todas las tapas. Y eso no se puede tolerar bajo ninguna circunstancia”.
The Crown temporada 6, episodio 6: la obsesión de Isabel II con Tony Blair
El episodio 6 comienza con la reina teniendo una pesadilla en la que Tony Blair (Bertie Carvel) ha sido nombrado rey. El episodio muestra a Isabel (Imelda Staunton) obsesionada y celosa de los índices de popularidad del primer ministro. No hay evidencia que sugiera estos hechos, ni que alguna vez la reina pronunciara en una conversación casual con Blair la frase “el hechizo que lanzamos es nuestra inmutabilidad”.
Pero, ¿la reina buscó el consejo del primer ministro sobre la modernización de la monarquía? ¿Quién sabe? Después de todo, las audiencias son privadas, no públicas. Pero es el príncipe Felipe (Jonathan Pryce) el representado con cierta precisión como un reacio hacia las perspectivas de cambio. En la vida real, dijo que estaba a favor de la modernización, pero “no por el simple hecho de hacer las cosas al estilo blairiano [sic]”.
Es factible que grupos focales fueran utilizados para evaluar las actitudes hacia la monarquía como se muestra en el episodio 6 de The Crown, pero estas escenas también parecen ser una referencia al desafortunado grupo Way Ahead del príncipe Carlos, formado por miembros de alto rango de la realeza en la década de 1990 para intercambiar ideas sobre planes de modernización (el grupo es mencionado en la temporada 5).
Tony Blair sí recibió un a ruidosa desaprobación de parte de miembros de la organización británica Women’s Institute (Instituto de la Mujer) cuando habló en su conferencia nacional en julio de 2000, en un marcado contraste con la entusiasta recepción ofrecida a la reina.
The Crown temporada 6, episodio 7: William va a la Universidad y su encuentro con Kate
El episodio 7 de la temporada final de The Crown comienza con el encuentro ficticio entre Kate Middleton (Meg Bellamy) y su madre Carole (Eve Best) con William y Diana (Elizabeth Debicki) en la Navidad de 1996, quienes están recaudando fondos para obras de caridad.
El episodio se centra en cómo Carole cree que su hija es “especial” y está destinada a casarse con William. La matriarca hace que Kate posponga un año su ingreso a la universidad, viaje a Chile como voluntaria para realizar trabajos sociales, tome un curso de arte en Florencia y cambie de institución educativa -de la Universidad de Edimburgo a St Andrew´s en Escocia- para cursar sus estudios junto a William. Esto realmente sucedió.
Kate se ha reído de las sugerencias de que tenía fotografías de William pegadas en la pared de su dormitorio cuando era adolescente. The Crown muestra una Kate teen fanatizada con el príncipe.
La primera novia de William en St Andrew’s en serie, Lola Airdale-Cavendish Kincaid, “de una familia tan elegante que tuvieron que nombrarla tres veces”, es ficticia, pero realmente tuvo muchas novias antes de Kate. Que el heredero al trono saliera con una chica rica pero sin un título señorial fue considerado subversivo [sic] en muchos círculos de la realeza.
La relación de Harry y William se presenta como más antagónica de lo que quienes los conocieron cuando eran adolescentes tienden a recordar. Aunque Peter Morgan le dijo a Variety que no había leído el libro Spare de Harry, estas escenas parecen sacadas directamente de sus páginas, al igual que la participación de William la noche que Harry se disfraza con un uniforme nazi para una fiesta (episodio 10). Annie Sulzberger, investigadora principal de The Crown, dijo recientemente que Spare “nos ayudó a pensar: ‘Está bien, esta es una mirada privilegiada y siento que estamos en el camino correcto'”.
The Crown temporada 6, episodio 8: el festejo en el Ritz y la enfermedad de Margaret
El episodio 8 de la temporada final de The Crown es un relato ficticio del día de la Victoria en Europa en 1945, que muestra a una joven princesa Margaret (Beau Gadsdon) y a la futura reina (Viola Prettejohn) saliendo a escondidas del palacio -con Lord “Porchey” Porchester (más tarde director de carreras de la reina y mejor amigo) y Peter Townsend (el escudero del rey de quien Margaret se enamoraría más tarde)- para asistir a la fiesta en el Hotel Ritz, donde bailan jittabug con soldados negros en el subsuelo.
El episodio se basa en la realidad: las princesas formaban parte de un grupo de 16 que abandonaron el Palacio esa noche (incluidos Townsend y Porchey). Fueron al Ritz, pero no al sórdido club de jazz que había en el sótano: “Por alguna razón, decidimos entrar por la puerta principal y tocar la conga”, recordó Margaret Rhodes, la prima de la reina, de su viaje al histórico hotel. Intentaron permanecer de incógnito y fracasaron, por lo que tuvieron que regresar al palacio a medianoche, no al amanecer.
El episodio también trata sobre la relación entre Margaret e Isabel, especialmente al final de la vida de Margaret (efectivamente, se quemó los pies en un accidente en un baño en Mustique). En general, la representación está bellamente realizada y la secuencia del festejo del Día de la Victoria ilustra su vínculo para subrayar cómo la reina abandonó una vida normal y sin preocupaciones para ser monarca.
Al igual que el personaje Bunbury en La Importancia de Llamarse Ernesto de Oscar Wilde, Margaret tenía un amigo imaginario llamado “Primo Halifax”, a quien culpaba de sus transgresiones.
The Crown temporada 6, episodio 9: el desfile de Kate, las denuncias de Mohamed Al-Fayed y el Jubileo de Oro de la reina
El episodio 9 de la temporada 6 de The Crown presenta la conocida historia del desfile de ropa interior en el que Kate modeló para llamar la atención de William. Lo que es ficción es el momento en que el guardaespaldas los interrumpe en medio del primer beso para informarle que la reina madre había muerto. William estaba de vacaciones de esquí con su hermano y su padre en Klosters, Suiza, cuando ella murió. El punto a destacar de la serie es que el placer siempre choca con el deber de ser parte de la realeza.
Un ímpetu narrativo similar parece estar detrás de una secuencia ficticia en la que William sale del almuerzo en la casa de los padres de Kate para estar al lado de la reina en el discurso por el Jubileo de Oro. Por supuesto, en la vida real, siempre estuvo destinado a estar ahí.
Las denuncias de Mohamed Al-Fayed (Salim Daw) fueron reales. El empresario egipcio insistió durante mucho tiempo en que el accidente fue intencional. Contrató investigadores y apeló varias veces las conclusiones de la investigación oficial francesa sobre el tema. Mou Mou sugirió que la familia real británica podría haber estado involucrada de alguna manera porque querían encubrir el hecho de que Diana estaba embarazada de su hijo y planeaban casarse.
Personas cercanas a Diana han negado sistemáticamente que estuviera embarazada o que planeara casarse con Dodi (Khalid Abdalla). Brown escribe que fuentes cercanas a Diana le dijeron que la princesa “no tenía intención de casarse con Dodi Fayed, sino que coqueteaba con él simplemente para molestar a Carlos y a la Familia Real”.
Aún así, en noviembre de 2008, Fayed leyó un testimonio escrito ante los Tribunales Reales de Justicia. “Ella me dijo que sabía que el Príncipe Felipe y el Príncipe Carlos estaban tratando de deshacerse de ella. Limpiaron las cubiertas. La asesinaron”.
The Crown temporada 6, episodio 10: el funeral de la reina, el casamiento de Carlos y los cameos de Olivia Colman y Claire Foy
El episodio diez y final de The Crown avanza hacia el funeral de la reina, pero trata principalmente de Carlos y su casamiento con Camila. Como muestra la serie, William y Harry no estaban contentos con la idea. Harry escribió en sus memorias que “le rogaron” a su padre que no se casara.
El episodio es completa el arco de redención de la reina, quien lentamente acepta que el amor de su hijo es verdadero. En la realidad, Isabel pronunció un discurso en la recepción de la boda de Carlos felicitándolo por estar “en casa y seco (home and dry, un modismo inglés que significa llegar a buen puerto] con la mujer que ama”.
La parte de que la reina contempla la posibilidad de abdicar es inventado, pero le sirve a Morgan para un encuentro final entre las actrices que interpretaron a Isabel: Imelda Staunton, Olivia Colman y Claire Foy.