The Mandalorian 3×3 por fin dio a los espectadores su primer vistazo de la vida bajo la Nueva República. La guerra entre los lados luminoso y oscuro de la Fuerza se extendieron por toda la galaxia durante milenios. Hay un sentido en el que las diferentes formas de gobierno representan perfectamente los diferentes aspectos de la Fuerza; los Sith tienden a acumular poder estableciendo imperios, mientras que la Orden Jedi existe en una forma de simbiosis con las repúblicas democráticas.
La derrota del Emperador Palpatine en El Retorno del Jedi (Richard Marquand, 1983) fue seguida por el colapso del Imperio, en parte debido a los propios planes de contingencia del Emperador. La caída del Imperio fue solo una breve interrupción en la historia galáctica, por lo que la vida bajo la sucesora del Imperio, la Nueva República, todavía no se exploró en profundidad en el canon de Star Wars.
Todo eso empezó a cambiar un poco en la temporada 3 de The Mandalorian, que presentó una trama secundaria extensa en la ciudad-planeta de Coruscant, que alguna vez fue la capital galáctica.
La Nueva República se formó después de El Retorno del Jedi
Tras la muerte del Emperador en El Retorno del Jedi, un evento crucial en la historia galáctica, la Alianza Rebelde, también conocida como Alianza para Restaurar la República, aprovechó la oportunidad para establecer un nuevo gobierno rival del Imperio: la Nueva República.
Después de enfrentarse a ataques del Imperio en varios mundos, la Nueva República se fundó oficialmente un año después de la destrucción de la Estrella de la Muerte en Endor, con Chandrila como su capital y Mon Mothma como su primera canciller electa.
En los primeros días de su gobierno, se perseguía a los señores de la guerra imperiales en toda la galaxia, mientras que Mon Mothma buscaba poner fin a la violencia y al derramamiento de sangre. El Imperio finalmente fue derrotado en una batalla sobre Jakku, y los leales a Palpatine huyeron a las Regiones Desconocidas, donde se reagruparían como la Primera Orden.
Aunque Mon Mothma creía que una Orden Jedi restaurada era esencial para la estabilidad galáctica, no presionó a Luke Skywalker para que hiciera de los Jedi una parte formal de la República. Leia Organa continuó su carrera como senadora, representando a los refugiados alderaanianos dispersos por la galaxia y convirtiéndose en una de las aliadas políticas más importantes de Mon Mothma. Han Solo, por otro lado, decidió retirarse como general y no involucrarse en la política.
Por qué la Nueva República desmanteló la flota de la Alianza
Mon Mothma no perdió tiempo en hundir la antigua flota imperial y en desmantelar también la Flota de la Alianza. Como senadora en la Antigua República, se había opuesto a la creación de las fuerzas armadas antes de los horrores de las Guerras Clon; aunque no tenía ningún problema con que los planetas se defendieran, veía la militarización de la galaxia como una peligrosa amenaza para la paz.
“He visto la guerra”, anunció en un discurso de alto perfil. “Conozco su forma. Conozco sus márgenes. Pero nunca me sentiré cómoda con ella… La guerra debe terminar pronto. No podemos seguir luchando”.
Es importante recordar que Mon Mothma no sabía que Palpatine había sobrevivido, o que el Imperio se estaba reuniendo en las Regiones Desconocidas. Aún así, las dos primeras temporadas de The Mandalorian sugieren fuertemente que su esperanza de paz era ingenuidad política.
Cómo la vida bajo la Nueva República era diferente a la del Imperio
La Nueva República desconfiaba del poder centralizado, por lo que a los mundos miembros se les permitía en gran medida autorregularse. Esto resultó ser un error, porque muchos planetas mantuvieron el estilo de vida imperial.
Coruscant ya no era la capital galáctica, pero la ecumenópolis era importante, y The Mandalorian 3×3 sugirió que la vida en la ciudad-planeta era apenas diferente a la del Imperio. Sin embargo, fuera del Núcleo Galáctico, las cosas eran muy diferentes; se prohibió la esclavitud y se derogó la legislación represiva del Imperio hacia las especies no humanas.
La diferencia entre la Nueva República y la Resistencia
Con el paso de las décadas, la senadora Leia Organa llegó a creer que el intento de integrar a los gobiernos imperiales anteriores en la República había sido un error. Estos gobiernos no solo se habían aferrado a sus formas, sino que también habían formado un poderoso bloque político para impulsarlos en el resto de la galaxia.
Aunque Leia no se dio cuenta, en realidad eran el ala política de un resurgimiento imperial; ella estaba viendo el surgimiento de la Primera Orden. Leia solo se dio cuenta de la magnitud de la amenaza después de un intento fallido de convertirse en canciller, que fue derrotado debido a una conspiración. Dejó la política, recurriendo a viejos amigos y aliados para crear un movimiento de Resistencia contra la oscuridad que sentía crecer en toda la galaxia.
Los instintos de Leia pronto demostraron ser correctos, con muchos mundos imperiales separándose de la Nueva República y formando la Primera Orden. Su movimiento de Resistencia respondió rápidamente armándose; pero la Nueva República, reacia a volver a la guerra, se negó a seguir su ejemplo. Esto resultaría ser un error fatal.
Se desarrolló un nuevo status quo inquietante en la galaxia de Star Wars, uno en el que la República se aferró a los ideales pacifistas incluso cuando la Primera Orden se preparaba para la guerra. Finalmente, como se ve en Star Wars: The Force Awakens (J.J. Abrams, 2015), la Primera Orden activó la superarma llamada Base Starkiller y destruyó la capital de la República, Hosnian Prime.
Esto fue seguido por una Blitzkrieg, ya que las flotas que habían viajado alrededor de la galaxia a través de las Regiones Desconocidas bloquearon sistemas planetarios completos. La Resistencia lanzó un poderoso contraataque, destruyendo con éxito la Base Starkiller, pero pronto se vieron obligados a huir. La República cayó a una velocidad vertiginosa y durante un año la Primera Orden gobernó la galaxia.
En qué se diferencia la Nueva República canon de Legends
El canon New Republic está fuertemente influenciado por el antiguo Universo Expandido de Star Wars, que ahora se llama Legends. Allí, como en la línea de tiempo del canon, Mon Mothma fue la primera líder de la Nueva República, y las divisiones internas casi la destrozaron.
Sin embargo, a diferencia del canon, en Legends, la Nueva República no se desmilitarizó; su versión de Mon Mothma vio la necesidad de un ejército, en gran parte debido a la amenaza del Remanente Imperial. Allí, fue sucedida por Leia Organa, quien se convirtió en una exitosa Jefa de Estado durante mucho tiempo.
En Legends, la Nueva República eligió a Coruscant como su capital, y la ciudad-planeta ocupó este papel hasta que cayó durante una invasión de los alienígenas extragalácticos llamados yuuzhan vong. El gobierno colapsó después de la caída de Coruscant, reemplazada por un nuevo gobierno llamado Federación Galáctica de Alianzas Libres. Ya sea en Legends o en el canon, la Nueva República de Star Wars estaba destinada al fracaso.
The Mandalorian se encuentra disponible en Disney+.