Faraway Downs: Australia | La Generación Robada según Baz Luhrmann

En la nueva serie de Disney+, Faraway Downs, Baz Luhrmann explora el pasado de Australia a través de un romance épico entre Nicole Kidman y Hugh Jackman.
2.5/5

“Sólo porque es así, no significa que debería serlo”, le dice la muy inglesa y aristócrata Lady Sarah Ashley (Nicole Kidman) al arriero de ganado Drover (Hugh Jackman), transformada en una Che Guevara al revés, iniciando la revolución de los ricos inclusivos contra los ricos racistas y monopólicos. Un grito de guerra por el progreso económico, racial y social. Pero el diálogo también podría referirse a Faraways Downs: Australia, la serie de Disney+ de seis episodios con la que Baz Luhrmann reinventa su película Australia de 2008, con una hora de material adicional y un nuevo final agridulce, más en sintonía con su retrato de una reconciliación incómoda y una independencia improbable.

Faraway Downs explora el pasado oscuro de Australia

Faraway Downs: Australia es una reelaboración hecha a partir del metraje existente de la película (que dura 165 minutos), adornada con música e iconografías aborígenes, que convierte la oda de Luhrmann al Hollywood de los 50’s en un melodrama postmoderno lleno de amor interclasista, inclusivismo hard core y rivalidades comerciales en un país atravesado por la II Guerra Mundial y por los residuos del colonialismo inglés, una sociedad blanca que negaba sistemáticamente la violación de mujeres indígenas y separaba a los niños mestizos de sus madres para convertidos en miembros productivos de la sociedad cristiana: la llamada Generación Robada.

Faraway Downs no es el corte del director de Australia, sino que tiene un cambio de trama significativo” -explicó Baz Luhrmann-. “Además, hice tiene la música de estos nuevos y emocionantes artistas pop indígenas, y hay imágenes de nuevos artistas autóctonos. Realmente miré el tema subyacente y lo enriquecí, que es tomar algo así como un melodrama, darle la vuelta y contarlo desde el punto de vista de un niño indígena”.

“Cuando miré el metraje que filmé, me di cuenta de que había una narración episódica. En el fondo, realmente hice Australia como una epopeya, y las epopeyas son largas. Simplemente pensé: tal vez algún día haga una película de dos partes. Pero luego llega el streaming, y es un poco como cuando Charles Dickens escribía sus novelas: las entregaba en capítulos en los diarios”.

faraway downs: australia critica
Hugh Jackman, Faraway Downs: Australia, Disney+

Cómo Baz Luhrmann reinventa su película Australia de 2008

Al tomarse más tiempo para desarrollar su historia (cerca de 225 minutos), Luhrmann utiliza el ritmo episódico para poner énfasis en sus personajes principales, Lady Sarah y Drover, una pareja de clases sociales diferentes que se unen en el duro territorio australiano para hacer del país un lugar mejor. Ella viaja desde su vida privilegiada en Inglaterra para intentar vender la propiedad -llamada Faraway Downs- que su marido insiste en conservar.

Al llegar a Australia, Lady Sarah entra en la órbita de Drover, un curtido outsider inglés que ha asimilado la cultura ancestral del lugar, trabaja por su cuenta y prefiere la compañía de los aborígenes. Su marido ha sido asesinado, y una conspiración rodea a la comunidad de Darwin, dirigida por el ganadero King Carney (Bryan Brown), que intenta comprar Faraway Downs a una fracción de su precio para mantener su monopolio de venta de ganado, asistido por su mano derecha, Fletcher (David Wenham). Lady Sarah comienza a cuidar a Nullah (Brandon Walters), un encantador niño aborigen cuyo abuelo chamán, el rey Jorge (el inolvidable David Gulpilil, fallecido en 2021), ha sido acusado del crimen.

Si Australia comenzaba como un western (con Lady Ashley, Drover, y Nullah luchando para restaurar Faraway Downs a su antigua gloria) y luego se convertía en una epopeya de guerra (con el ataque japonés a Mission Island y Darwin), el formato extendido de Faraway Downs: Australia le da a Luhrmann espacio para realizar una transición entre los dos géneros de manera más fluida.

Si la premisa básica -una mujer blanca privilegiada se enamora de un galán rudo y descubre su propia identidad en el proceso-, es de una estereotipación pornagráfica, la serie es en general consciente de su romanticismo vintage, su maniqueísmo de villanos hiperbólicos y de su aproximación exotizada de la cultura aborigen. Lo que sostiene a la serie es Brandon Walters (puro talento en estado natural) como Nullah, aportando una conmovedora autenticidad mientras el niño se debate entre la vida con sus salvadores blancos y el deseo de reclamar su propia herencia cultural.

faraway downs: australia
Brandon Walters, Faraway Downs: Australia, Disney+

La visión del pasado y del futuro en Faraway Downs: Australia

Para Luhrmann, “la película pretendía ser una epopeya anticuada con un tema muy feo en su centro: el tema de la Generación Robada, cuando los niños de raza mixta fueron secuestrados por la fuerza por el gobierno, arrancados y separados de sus derechos y de su cultura. Esa es una cicatriz en la historia de este país, y quería resumirla en un gran romance a la antigua ambientado en ese paisaje”.

“Cuando volví y vi el final original, me di cuenta de que es importante, si vamos a ceñirnos al tema, que Sarah no sea feliz para siempre. Aprende que ninguna tierra, ningún niño, ninguna persona la define, y que tiene que mantenerse firme como mujer y que está sola. Tiene que afrontar el futuro, y sólo ella es dueña de su historia, así que será mejor que viva una buena historia”.

La serie está saturada de estampidas de vacas, conjuras, racismo, referencias a El Mago de Oz y la energía característica del estilo cinematográfico de Luhrmann, que parece menos interesado en describir con precisión el horror del pasado de Australia que en rozar sus superficies para crear un mito nacional: un cuento de hadas moderno e inspirador de historias, países, canciones y sueños. Este enfoque romantiza la experiencia de los aborígenes, al tiempo que mantiene la historia de amor central al borde de la telenovela y desborda ingenuidad en su optimismo para un futuro de arcoiris interraciales.

CRÉDITOS

FARAWAY DOWNS: AUSTRALIA

faraway downs: australia critica

Dirección

Baz Luhrmann

Guion

Baz Luhrmann

Fotografía

Mandy Walker

Música

Kara Talve

País

Australia

Duración

225 minutos

Reparto

Hugh Jackman, Nicole Kidman, Bryan Brown, Ben Mendelsohn. Jack Thompson, Brandon Walters, David Wenham

TRÁILER

Crítica No Digas Nada (2024) | La serie de Disney+ sobre el IRA que explora las contradicciones de la lucha armada

No Digas Nada de Disney+ revisita el conflicto armado de Irlanda del Norte para ofrecer un retrato complejo de la violencia, el silencio y el precio de...

Crítica Emilia Pérez (2024) | El narco musical sobre la identidad de género y el trauma mexicano

Más que una película trans, Emilia Pérez es una forma cinematográfica en constante mutación: de la ópera al thriller, propone una nueva manera de abordar...

Grotesquerie (Disney+) | La nueva serie de Ryan Murphy explora la decadencia social

Con una imaginería barroca y un guion cargado de simbolismo, Grotesquerie intenta cuestionar el pathos contemporáneo, aunque no logra escapar de las trampas...