En Dune: Parte Dos, los poderes de Paul Atreides se expanden, permitiéndole tener múltiples sueños y visiones sobre el futuro. Desde una edad temprana, su madre, Lady Jessica, lo entrenó en las habilidades Bene Gesserit, y su proximidad a la especia en Arrakis aumenta estas habilidades. Al integrarse completamente en la cultura Fremen y tomar el Agua de la Vida para convertirse en Lisan al Gaib, sus visiones se intensifican, construyendo sobre lo que vimos en la primera película.
Estas visiones y sueños son esenciales para el desarrollo de la trama de la segunda parte. Aunque muestran diferentes futuros posibles, la mayoría están relacionados con el destino de Paul y su inevitable ascenso al poder. Algunas visiones son ambiguas en su significado, mientras que otras son más directas sobre lo que está por venir. Con el aumento de sus poderes, Paul comprende mejor el significado de estas visiones, lo que proporciona más información sobre lo que nos espera en esta película y más allá.
En Dune: Parte 2, Paul tiene un sueño sobre el funeral de su padre
El primer sueño de Paul en Dune 2 ocurre cuando ve lo que parece ser el funeral de su padre, el Duque Leto Atreides. El personaje interpretado por Oscar Isaac murió después de una traición de parte del Dr. Yueh y un intento de asesinato del Barón Harkonnen. El sueño de Paul muestra el retrato del Duque Leto enmarcado y sentado al lado de una montaña en Arrakis. La gente rodea el retrato y lamenta su pérdida mientras se inclinan ante él.
Un funeral para el Duque Leto no se muestra en Dune 2 más allá de este sueño, lo que significa que esto probablemente es su deseo de lo que habría sucedido después del fallecimiento de su padre. Debido a la forma en que murió y la toma de control de Arrakis por parte de los Harkonnen, no hubo oportunidad de rendirle homenaje al líder de la Casa Atreides.
Sin embargo, Paul no olvida a su padre aunque no haya funeral. Las palabras y sabiduría de Leto permanecen con Paul a lo largo de la película, incluyendo a Paul diciendo: “Padre, encontré mi camino” y quitándose el anillo Atreides mientras es aceptado por los Fremen.
Paul tiene una visión de lo que va a suceder si va al Sur
La visión más impactante de Paul ocurre al principio de la película, cuando ve un futuro desolador que se desencadenaría si decide dirigirse al sur de Arrakis. En la visión, lo vemos siguiendo a una mujer desconocida a través de los desiertos, pasando junto a numerosos cuerpos sin vida. Esta visión le advierte a Paul sobre las terribles consecuencias que desencadenaría su decisión de ir al sur: una guerra galáctica que resultaría en la muerte de miles de millones de personas, convirtiéndolo en responsable de un genocidio de proporciones inimaginables.
Esta visión atormenta a Paul durante toda la película. Aunque no es la primera vez que vislumbra la posibilidad de una guerra santa en Dune bajo su liderazgo, el cómo sucedería era desconocido para él hasta entonces. Esta revelación lo lleva a rechazar vehementemente la idea de ser el Lisan al Gaib y lo impulsa a hacer todo lo posible para evitar el fatal desenlace al sur. Paul no desea cargar con la responsabilidad de tantas muertes, lo que lo lleva a luchar incansablemente para cambiar el curso de los eventos. Sin embargo, sus esfuerzos resultan en vano en última instancia.
Paul tiene una visión de Lady Jessica llevándolo al sur
Las primeras visiones de Paul sobre su viaje al sur de Arrakis no revelaron directamente la identidad de la misteriosa mujer ni su responsabilidad en los eventos catastróficos que se avecinaban.
Esto dejó abierta la posibilidad de que cualquiera de los prominentes personajes femeninos de Dune: Parte Dos – Chani, Jessica, Irulan o Alia – pudiera ser la clave de su visión. Sin embargo, más adelante, Paul tiene una visión más clara que revela que su madre, Jessica, es quien lo acompaña al sur. Este vistazo al futuro le permite a Paul darse cuenta de que Jessica tiene sus propios planes en marcha.
El papel de Jessica en Dune: Parte Dos cambia cuando se convierte en la Madre Reverenda de los Fremen, reemplazando a la anterior líder Bene Gesserit. Con conocimiento de las profecías de la cultura y viendo cómo muchos ya consideran a Paul como su mesías, Jessica toma la iniciativa para ganarle seguidores.
Comienza sembrando creencias entre la gente del norte, pero sus verdaderos motivos apuntan al sur, donde espera consolidar el apoyo de la parte más religiosa y fanática de los Fremen. Cuando Paul finalmente se encuentra con su madre en el sur, los resultados de su estrategia son evidentes, ya que Paul asciende al poder con su ayuda.
Paul sueña con la muerte de Chani
Todos los sueños y visiones de Paul en Dune: Parte Dos tienen un impacto diferente en él, pero el que involucra a Chani lo afecta profundamente. En este sueño, mientras está dormido, ve a Chani parada en la cima de una duna de arena, observando el paisaje de Arrakis. De repente, una explosión sacude la distancia, haciendo que Paul corra hacia ella. Cuando llega, encuentra a Chani con quemaduras en la cara, aparentemente causadas por la radiación de la bomba atómica que detonó. El sueño culmina con Chani muriendo en los brazos de Paul.
A pesar de que Chani no muere en la película, este sueño deja varias interpretaciones posibles. Una de ellas es que refleja los temores de Paul de que Chani pueda ser una víctima de la guerra que se avecina. Con Paul preparándose para usar bombas atómicas en su búsqueda de poder y el inicio de una guerra inminente, es comprensible que tema por la seguridad de Chani en medio de los conflictos. También es posible que Denis Villeneuve haya utilizado este sueño para insinuar el destino de Chani en Dune 3.
Otra interpretación es que este sueño no sea literal, sino más bien una visión metafórica. Como se ha visto a lo largo de la historia de Dune, no todas las visiones de Paul se materializan exactamente como las ve. Quizás este sueño intenta advertir a Paul sobre las consecuencias de seguir el camino de la guerra y el uso de bombas atómicas, sugiriendo que podría perder a Chani si continúa por ese camino. Aunque Chani no muere, su partida al final de la película podría ser lo que la visión estaba tratando de comunicar, aunque Paul la interpretó de manera más literal en cuanto a la posible pérdida de Chani.
Paul pide consejos a Jamis
En un momento crucial de su viaje para convertirse en Lisan al Gaib, Paul tiene una visión que involucra a Jamis. En esta visión, mientras busca orientación sobre su próximo paso, escucha diversas voces, pero es Jamis quien se le aparece y le dice que necesita comprender el cuadro completo: pasado, presente y futuro, y beber el Agua de la Vida.
Aunque Jamis está muerto, su regreso a través de esta visión es intrigante. Apenas interactuaron brevemente en la primera película, y Jamis mostró hostilidad hacia Paul y su madre. Sin embargo, otras visiones de Paul parecían retratar a Jamis como un amigo cercano, lo que llevó a que Maud’Dib confiara en él. Dune: Parte Dos refuerza esta percepción al mostrar a Jamis como la figura que Paul ve cuando llega el momento de tomar una decisión que cambiará su vida y el destino del universo.
Paul tiene una visión de Arrakis y Alia
La decisión de Paul de beber el Agua de la Vida le otorga una visión sin precedentes del futuro, proporcionándole una imagen clara del destino de Arrakis. En esta visión, ve las arenas entremezcladas con mares de agua que han regresado. Además, se encuentra con una versión adulta de su hermana, Alia Atreides, interpretada por Anya Taylor-Joy, quien está de pie en la arena y le dice a Paul: “Te amo”, antes de que la visión concluya.
Esta visión es una de las más significativas para Paul, ya que es una de las pocas instancias en las que vislumbra un posible futuro “positivo“. La vuelta de los mares a Arrakis es el resultado directo de Paul convirtiéndose en Lisan al Gaib y Emperador, lo que sugiere que cumple con la esperanza de restaurar agua y vegetación en el árido planeta. Además, ver una versión futura de Alia le muestra a un miembro de la familia con el que aún no ha interactuado, pero con quien eventualmente formará un vínculo cercano.
Paul tiene una visión de su pelea con Feyd-Rautha
La visión más breve de Paul en Dune: Parte Dos ofrece un vistazo a su enfrentamiento con Feyd-Rautha Harkonnen. En esta visión fugaz, se muestra un destello del próximo duelo, donde alguien apuñala a otra persona en el estómago con un cuchillo. En ese momento, no queda claro si Paul es quien recibe el ataque o si está infligiendo un golpe fatal a su oponente. Solo cuando se desarrolla la pelea entre Paul y Feyd-Rautha, la visión cobra sentido, ya que le brinda a Paul una idea de cómo derrotar a su primo en combate.
Paul tiene una visión que confirma que es el nieto del Barón Harkonnen
Una revelación crucial surge cerca del desenlace de Dune: Parte Dos cuando Paul tiene otra visión impactante. Esta visión comienza con imágenes de un bebé recién nacido y luego muestra al Barón Harkonnen reconociendo al niño como su descendiente, revelando que él es el padre.
El significado de esta visión no queda oculto, ya que Paul discute las imágenes con su madre. Es así como confirma que Jessica es hija del Barón Harkonnen, un hecho del que ella misma no tenía conocimiento hasta que bebió el Agua de la Vida.
Este giro que conecta a Jessica con la línea de sangre Harkonnen es otro aspecto del plan de la Bene Gesseritpara engendrar al Kwisatz Haderach. Esto implica que la Bene Gesserit ideó la unión de las líneas de sangre Atreides y Harkonnen, convirtiendo a Paul en el nieto del Barón Harkonnen.
A través de esta visión, Paul descubre que es parte de dos casas poderosas, así como de la Bene Gesserit. Estos hechos, combinados con su ascenso a Lisan al Gaib, Emperador y miembro de la Casa Corrino, destacan el poder que ha alcanzado para el final de Dune: Parte Dos.
Dune: Parte Dos se encuentra disponible en cines.