En la nueva serie animada de Netflix Agent Elvis (Agente Elvis), el Rey del Rock and Roll tiene nuevas actividades: interpreta Suspicious Minds durante el día y mata a esas mentes sospechosas por la noche. Elvis Presley tendrá que cambiar su traje blanco por una mochila propulsora tras ingresar como agente encubierto a un programa de espías del Gobierno para ayudar a combatir las fuerzas oscuras que amenazan a Estados Unidos… sin faltar a su trabajo regular como el rey del rock and roll.
El tráiler de Agente Elvis con Matthew McConaughey
Con la voz de Matthew McConaughey, Elvis es ahora un agente secreto que trabaja para un programa de espionaje del gobierno. Con una animación hecha per el estudio detrás de Spider-Man: Into the Spider-Verse, Agente Elvis promete ser una montaña rusa retro y ruidosa.
El génesis de la serie es sin duda el lisérgico encuentro entre Elvis y el entonces presiente Richard Nixon, ocurrido en diciembre de 1970 en salón oval de la Casa Blanca. En plena ofensiva militar en la guerra de Vietnam y con una juventud que ya había perdido el impulso revolucionario por el estado policial de Nixon, pero cuya lucha se atomizaría en agrupaciones minoritarias más organizadas -feminismo, gays, derechos civiles-, el cantante le pidió al presidente la posibilidad de trabajar como agente encubierto para “defender a su país”.
Elvis se oponía a la cultura de las drogas, al movimiento hippie, a los movimientos estudiantiles y a las Panteras Negras. Pretendía que Nixon le tomara juramento como un agente encubierto de la Oficina de Narcóticos y Drogas Peligrosas (Bureau of Narcotics and Dangerous Drugs, actualmente la DEA) para usar su fama e infiltrarse en las organizaciones de izquierda. Nixon no tenía la potestad para nombrarlo agente, pero le mandó la réplica de una placa de agente secreto a su hotel.
La historia se narra en Elvis & Nixon (Liza Johnson, 2016), con el enorme Michael Shannon como Elvis.
Co-creado por Priscilla Presley, Agente Elvis llegará a Netflix en marzo.