El Juego Bonito (The Beautiful Game) elabora una ficción alrededor un evento real: la Copa Mundial de Fútbol Calle, que durante dos décadas ha reunido a cientos de indigentes de todo el mundo. Protagonizada por Bill Nighy como Mal, un viudo afligido que se dedica a entrenar al equipo que representará a Inglaterra en el torneo, la película tiene como objetivo generar conciencia sobre la competencia real y cambiar las percepciones de los espectadores sobre el drama de los homeless y las personas en recuperación.
En El Juego Bonito, Mal es un veterano DT que entrena a indigentes como una forma de darle sentido a su vida. Sus jugadores ven la Copa Mundial de Fútbol Calle como un paso hacia la redención. Las personas que participan en el torneo se han quedado sin hogar, están en recuperación de adicciones o son asylum seekers (inmigrantes refugiados en busca de protección internacional).
Nathan (Callum Scott Howells) es un adicto a la heroína alejado de su familia, a la que le han sugerido que no vuelva a hablar con él; Cal (Kit Young) dejó a su hijo solo en casa durante 48 horas mientras él se iba de fiesta; durante el torneo, hay un encantador encuentro entre Jason (Sheyi Cole) con una jugadora estadounidense, Rosita (Cristina Rodlo): los dos tienen una cita para mantenerse en forma para los partidos.
La Copa Mundial de Fútbol Calle, el evento real que inspiró la película El Juego Bonito de Netflix
La directora de El Juego Bonito, Thea Sharrock, también eligió a ex jugadores reales del torneo para ser parte del equipo estadounidense. Entre ellos se encuentra Lisa Wrightsman, la DT en la Copa Mundial de Fútbol Calle realizada en Sacramento en 2023 y que había participado como jugadora en Río de Janeiro en 2010. Con la camiseta número 3, es la que hace el segundo gol de Estados Unidos en el partido por el tercer puesto contra el equipo inglés.
Wrightsman dijo que se identifica con el jugador inglés Vinny (Micheal Ward), a quien Mal busca para que sea parte del equipo inglés al comienzo de la película, mientras muestra sus habilidades a un grupo de niños. De la misma manera que Vinny tuvo una prometedora carrera en el fútbol profesional, Wrightsman jugó en Sacramento State. Cuando perdió la oportunidad de jugar profesionalmente, no vio otro futuro en el horizonte. Se volvió adicta a las drogas y al alcohol y terminó en la cárcel cuando tocó fondo.
Mientras estaba en recuperación, conoció a un grupo de chicos que practicaban para un torneo de Street Soccer USA (Fútbol Callejero de Estados Unidos), auspiciado por una de las organizaciones de servicios sociales que selecciona a los jugadores de la Copa Mundial de Fútbol Calle. Se divirtió muchísimo en el torneo realizado en Río y terminó enseñando fútbol a comunidades en riesgo. Ahora ayuda a dirigir la sección de Sacramento de Street Soccer USA, que introduce en el fútbol a jóvenes de bajos ingresos.
Wrightsman espera que los que vean El Juego Bonito perciban las transformaciones personales que pueden ocurrir cuando las personas vulnerables reciben los recursos adecuados. Ella describe cómo se sintió ser jugadora en la Copa Mundial de Fútbol Calle y cómo le dio una nueva perspectiva de la vida: “Todos tenemos miedo de morir y no queremos tener problemas, pero nadie realmente ve que el futuro sea emocionante. La Copa Mundial de Fútbol Calle me dio una visión de la vida que me entusiasma. Y si este es el resultado de estar sobrio y haciendo cosas buenas, voy a hacer más de esas cosas”.
Una persona en recuperación que Wrightsman ha patrocinado también aparece en El Juego Bonito: Angela Draws -con la camiseta número 4 en la película-, juega en el equipo de Estados Unidos y anima a sus compañeros con entusiasmo desde el banco de suplentes. Draws conoció a Wrightsman cuando se estaba recuperando de una adicción a las drogas, y Wrightsman la eligió para jugar. Ella nunca había jugado fútbol fuera de la escuela primaria, pero dice que es la razón por la que no ha recaído en 12 años. Después de competir en la Copa Mundial de Fútbol Calle en Santiago de Chile en 2014, ahora trabaja como personal trainer en Sacramento.
Draws espera que El Juego Bonito de Netflix inspire a la gente a ser más amable con las personas sin hogar y con las personas que se recuperan de diversas adicciones. “Nunca se sabe la magia que hay dentro de alguien que duerme en la calle. Nunca se sabe la belleza o el potencial que tiene. No somos nuestras circunstancias. No somos lo peor que hemos hecho ”.
La próxima Copa Mundial de Fútbol Calle está programada del 21 al 28 de septiembre en Seúl, Corea del Sur, y contará con equipos de 49 países.
El Juego Bonito está disponible en Netflix.
Mirá el tráiler a continuación:
