Cuando Fede Álvarez decidió hacer Alien: Romulus, supo desde el principio que quería honrar no solo a Alien y a Aliens, las películas más aclamadas y populares de la serie, sino a toda su mitología . “Pensé, ‘tenemos que abrazarlas a todas’”, dijo en una entrevista reciente a Variety.
Por qué Alien: Romulus incluye a Ian Holm
El director uruguayo construyó una parte importante de la historia de Alien: Romulus -ubicada en la línea de tiempo de la franquicia entre la original y la secuela de James Cameron– en torno a Rook, una nueva versión de un personaje de la película original: Ash, el androide sintético interpretado por el difunto Ian Holm, con inclinación a la obediencia debida a la Corporación Weyland-Yutani.
Después de que Alien 3 y Alien vs. Depredador expandieran el ciclo de vida del androide Bishop (Lance Henriksen), y David (Michael Fassbender) protagonizara las precuelas Prometheus y Alien: Covenant, para Álvarez, el papel de Holm (o al menos su rostro y su voz) debía resucitar.
“En cierto modo, fue una cuestión de justicia”, afirma. “Me pareció muy injusto que Lance Henriksen hiciera tantas apariciones, y también Michael Fassbender. Y me pareció una locura que Ian Holm nunca volviera”.
El énfasis de Fede Álvarez en los efectos prácticos predeterminó la creación de un animatrónico actual para interactuar con su joven elenco como parte de la trama, que sigue a un grupo de jóvenes trabajadores que intentan saquear una estación espacial abandonada para poder escapar de su colonia postapocalíptica. La necesidad de una autoridad que explique cómo se abandonó la nave allanó el camino para las discusiones sobre un androide que es de la misma generación que Ash.
“Hablando con Ridley, a los dos se nos ocurrió la idea de si se parecía a Ian Holm, lo cual es diferente a ser Ian Holm o incluso a ser Ash”, insiste Álvarez. “Nunca nos hubiéramos atrevido a reproducir eso porque no se puede reproducir con ninguna tecnología el talento de un actor. Nunca se pueden capturar los matices de la actuación de alguien y sus decisiones. Así que diseñamos un personaje diferente, pero que comparte el mismo aspecto”.
Antes de dejarse llevar demasiado por la idea, Álvarez dice que se puso en contacto con los herederos de Holm para obtener la bendición. “Luego, lo primero que hice fue llamar personalmente a su viuda, a su familia y a sus hijos para asegurarme de que todos estuvieran de acuerdo con esta idea”. Dado que el cineasta había perdido a su propio padre en 2021, el mismo año en que murió Holm, reconoció que tal vez no querrían verlo aparecer en la pantalla. Pero pronto se dio cuenta de que la idea tenía el potencial de reconciliar algunos sentimientos sobre la industria que Holm poseía en el momento de su muerte.
“Su viuda me dijo que Ian sintió que, en los últimos 10 años de su vida, Hollywood le dio la espalda y que no recibió muchas ofertas”, comparte. “Y dijo que le habría encantado que lo invitaran de nuevo a Alien, porque amaba a Ridley y amaba esa franquicia”.
Aunque dice que disfrutó darle a Holm una oportunidad más de aparecer en pantalla (a través de animatronics), Álvarez enfatiza que la logística para lograr esas secuencias prohíbe que ideas similares ocurran con cierta frecuencia. “Recuerdo que alguien me dijo: ‘Esto es todo, nos van a reemplazar como actores’. Y yo le dije: ‘Amigo, si te contrato, costará lo que sale una persona. Para hacerlo de esta manera, tienes que contratar literalmente a 45. ¡Y aún tienes que contratar a un actor que haga la interpretación!’”.
Traer de vuelta a Ash, o a un personaje parecido a Ash, parece una obviedad: Alien original no solo es una obra maestra, sino que los fans de la franquicia lo conocen fotograma a fotograma. Pero una secuencia durante el clímax de la película conecta aún más la acción de Alien: Romulus con otros capítulos notablemente menos populares.
El Xenomorfo del final de Alien: Romulus, explicado
En en final de Alien: Romulus, Kay (Isabela Merced) da a luz a un híbrido de ADN humano y alienígena; la criatura, denominada “la descendencia” por los realizadores, no solo se parece a los Ingenieros, la raza alienígena que concibió a la humanidad, sino que también se hace eco de la silueta del xenomorfo humanoide que una versión clonada de Ripley da a luz en la película de Jean-Pierre Jeunet de 1997, Alien Resurrection.
Sorprendentemente, Álvarez dice que en realidad no había pensado en esta última conexión hasta que su hijo se la señaló en el estreno de la película. “Recientemente había visto con un amigo todas las películas de Alien, y cuando sale la descendencia, dice: ‘Es como en Resurrection‘”.
“Realmente no lo había procesado de esa manera, pero es cierto, es esta abominación la que sale”, dice el director, explicando que en realidad se había centrado más en la mitología de las precuelas de Scott, Prometheus y Alien: Covenant, que exploran los componentes genéticos de los humanos y los extraterrestres. “Tenía la esperanza de que la gente captara toda la parte del Ingeniero”, dice.
“La sustancia negra es la raíz de todo lo que se introdujo en Prometheus”, explica Álvarez. “Es la raíz de toda la vida, pero también, en particular, de la que salen los xenomorfos, lo que significa que tiene que estar dentro de ellos. Es casi el semen de los xenomorfos. Así que pensamos que, si afecta a tu ADN, y los Ingenieros claramente surgieron de la misma raíz de vida, tenía todo el sentido para mí que la descendencia de un humano y un xenomorfo fuera a lucir así”.
Lejos de conciliar las distintas líneas argumentales y cronologías, Álvarez admite que la forma de vida resultante probablemente plantea más preguntas que respuestas. “Probablemente se trate de una especie nueva, porque esa mezcla nunca se había producido antes”.