La candidata de España a los premios Oscar, La Sociedad de la Nieve, trata sobre un contrato: el que hicieron los vivos con los muertos. “Las personas que vivieron esa historia estaban ofreciendo sus cuerpos a sus amigos, en caso de que los necesitaran”, dice el director Juan Antonio Bayona. “Y en esa idea hay algo trascendente, porque es la comprensión inconsciente de que tú y yo somos la misma cosa. Que si tu vives, yo vivo”. En condiciones inhumanas, a más de 3300 metros de altura y un frío que congela la sangre, 16 sobrevivientes escaparon del infierno blanco. Tardaron 72 días; Bayona, más de 10 años en poder contar su historia.
Una de las razones por las que tomó tanto tiempo hacer la película fue que el director quería filmar en castellano, con el acento uruguayo de los protagonistas de la historia real. Además, con un presupuesto estimado en 70 millones de dólares para llevar los equipos de filmación y rodar en las montañas, era difícil recaudar esa cifra de manera independiente. Y entonces apareció Netflix.
Cómo se hizo La Sociedad de la Nieve de J.A. Bayona
La Sociedad de la Nieve está basada en el libro de entrevistas de Pablo Vierci de 2016 con los 16 sobrevivientes, Tuve que Sobrevivir, que tiene una dimensión espiritual difícil de traducir a imágenes. “Pensé en lo interesante que sería contar una historia que comenzara con un solo personaje. Y este personaje le da la oportunidad a las demás personas de terminar la historia. Y creas una metáfora visual o narrativa, donde al personaje se le permite salir y llegar al final, gracias a sus amigos, y sus amigos pueden llegar gracias a él, que es básicamente la esencia de la historia.
Bayona necesitaba a Netflix para hacer una película de estas dimensiones. “La logística fue una locura”, dice la coproductora, Belén Atienza. “Era muy caro llevar un equipo de filmación al Valle de las Lágrimas, lo cual ya es una locura. Trabajamos dos veces ahí, y otros 10 días más en Sierra Nevada, en España”.
Al comienzo de la producción, Atienza y Bayona fueron en helicóptero a recorrer la zona del accidente con algunos actores. Hubo avalanchas. A esa altitud, los drones con grandes cámaras no pueden volar debido a la falta de oxígeno en el aire. Así que tuvieron que utilizar drones y cámaras más chicas. “Se suponía que esa sesión sería para los fondos y los efectos visuales”, dijo Atienza. “No tenemos montañas en 3D. Terminamos filmando con los actores. Y como siempre, después del rodaje al día siguiente hubo una avalancha. Y por eso fue complicado y muy caro”.
La producción principal tuvo lugar a 3.000 metros de altura sobre una estación de esquí de Sierra Nevada. “Les proporcionamos a los actores algo similar en la nieve”, dijo Bayona. “Hacía frío. Era inaccesible. Entonces experimentaron un poco de eso. Y al mismo tiempo, pudimos traer allí a todo un equipo de cámara”.
Los realizadores transformaron la zona en su propio estudio de cine, con dos fuselajes para tomas exteriores con nieve y viento y un escenario portátil traído desde Bélgica para las tomas interiores. “Luego teníamos un tercer fuselaje, en otra ubicación, también para tomas exteriores”, dice Atienza. “Estaba en caso de que no fuera posible filmar a 3000 metros debido al clima. Lo peor fue no saber qué íbamos a rodar al día siguiente. Porque todos los días tendremos que mirar el pronóstico”.
Por qué tardó J.A. Bayona tardó 10 años en realizar La Sociedad de la Nieve
Bayona podría haber hecho La Sociedad de la Nieve en inglés -como Alive (1993) de Frank Marshall, basada en el bestseller de Piers Paul Reid-) en algún momento anterior de su carrera, pero “era importante estar lo más cerca posible de la realidad”- explica. “También era importante tener un elenco que hablara usando su acento, un elenco desconocido, porque cuanto más desconocidas fueran las caras, más realista era el enfoque”.
Al final, aunque la película tardó diez años en realizarse, Bayona cree que toda su experiencia en la industria de gran presupuesto de Hollywood –Jurassic World: Fallen Kingdom, los dos primeros episodios de El Señor de los Anillos: Los Anillos de Poder– le ayudó al momento de filmar La Sociedad de la Nieve. “Pensábamos que íbamos a rodar esto mucho antes. Pero este es el viaje. Y lo que rodamos en Hollywood nos permitió rodar esta película como queríamos hacerlo”.
“Llegó en el momento adecuado”, dice Atienza. “Porque J.A. había hecho dos grandes proyectos de Hollywood, con todo lo que eso significa, lidiar con maquinaria enorme, tener que rodar de una manera diferente en algo que no es tu propio idioma. El Señor de los Anillos era un universo gigantesco. La energía era la correcta, abordar algo tan desafiante en español después de hacer estos dos proyectos masivos de Hollywood”.
“Disfruté trabajando en el diseño de ese mundo”, dijo Bayona. “Pensé que iban a ser sólo nueve meses. Y finalmente fue un año y medio debido al COVID. Pero eso también me dio tiempo para seguir desarrollando el guión de La Sociedad de la Nieve, así que me alegro de cómo fueron finalmente las cosas. Porque tuve la experiencia. Y me sentí más preparado para esta película después de todo lo que pasé”.
Antes de que comenzara la producción en Nueva Zelanda en febrero de 2020 de Los Anillos de Poder, Bayona y Atienza tuvieron que tomar una decisión: los sobreviviente del accidente de Los Andes estaban envejeciendo, y querían que se contara su historia. Finalmente, tuvieron que invertir su propio dinero en adquirir los derechos del libro. “Así que lo intentamos”, dijo Atienza. “Y, gracias a Dios, Netflix vino al rescate. Inmediatamente se mostraron receptivos con la historia y J.A. y así fuimos con ellos”.
La filmación de La Sociedad de la Nieve de Netflix
En la primera semana de rodaje, casi todos los actores y el director enfermaron de COVID, que demoró el trabajo sobre las escenas, algunas filmadas con dobles. Durante todo la etapa de filmación, los actores estuvieron a dieta. Comenzaron con algunos kilos de más cuando bajaron del avión. “Algunos perdieron más de 20 kilos. Los chicos estaban súper motivados. Me enteré que una vez terminado el día se escapaban al gimnasio a seguir entrenando para bajar más de peso”.
Bayona y el director de fotografía Pedro Lucas desarrollaron un estilo documental improvisado al filmar a su extenso elenco de 25 actores. “Los actores sabían mucho de la historia, estaban preparados”, afirma Bayona. “Fue visceral. Entonces no había ningún plan ni dogma, desechamos todos los storyboards porque era imposible traer una grúa o imposible traer un dolly. Y a veces era imposible colocar la cámara en el set cuando estábamos filmando la avalancha”.
“Estamos en un espacio limitado con 19 actores, ocho cadáveres y un equipo de cámara. Entonces no había espacio para mover la cámara. En un momento determinado, se me ocurrió la idea de utilizar Periscope, que se utiliza para grabar publicidades de comida. Descubrí que usando esos lentes, todos estaban enfocados, y me permitía estar cerca de los rostros de los actores. Porque ese momento es el peor de la historia, donde nace la sociedad de la nieve. Todos son iguales. Todos son tan importantes como los demás”.
La Sociedad de la Nieve se estrena en Netflix el 4 de enero.
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